Alibaba anunció que planea invertir 1.000
millones de dólares en computación en la nube en todo el mundo en un intento
por competir con Amazon.com en los servicios por internet, según reseñó The Wall Street Journal.
El gigante chino del comercio electrónico dijo que una parte
del dinero se utilizará para crear centros de datos en Oriente Medio, Japón y Europa.
La división de computación en la nube de Alibaba, Aliyun, abrió su primer
centro de datos en el extranjero este año en Silicon Valley y planea abrir otro
en la costa este estadounidense.
Los fondos también se usarán para expandir y apoyar la red de
socios de telecomunicaciones y tecnología de Alibaba, que actualmente incluye a
Intel y a Singapore Telecommunications, señaló la compañía.
“Esta inversión adicional de 1.000 millones de dólares tan
sólo es el comienzo”, dijo Daniel Zhang, presidente ejecutivo de Alibaba, en un
comunicado. “Confiamos en que Aliyun faculte continuamente a clientes y socios
con nuevas habilidades y ayude a las empresas a mejorar su infraestructura
básica”.
La mayoría de clientes de Aliyun son empresas chinas que
operan fuera de la China continental, dijo la semana pasada Simon Hu,
presidente de Aliyun.
Aunque no le resultará fácil atraer a los clientes
estadounidenses no familiarizados con la marca y sus ofertas, Hu dijo que
Aliyun aspira a convertirse en un competidor serio de la división de
computación en la nube de Amazon, Amazon Web Services.
“A Amazon le llevó 10 años llegar a donde está hoy”, indicó
Hu la semana pasada. “Aliyun acaba de cumplir seis años y confiamos en alcanzar
o superar a Amazon en tres o cuatro años”.
El naciente mercado en la nube de China crece rápidamente,
según la consultora Bain & Co. En un informe este mes, previó que el gasto
en operaciones en la nube en China podría llegar a 20.000 millones de dólares
para 2020, frente a 1.500 millones de dólares en 2013. La firma de análisis IDC
estima que en todo el mundo, el gasto en servicios en la nube ascenderá a 118.000
millones de dólares este año.
Fuente: The Wall Street Journal
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